Moda y archivo en la Historia Transcuir de Colombia
En una nueva entrega del dossier «Arte y moda en América Latina», Revista Transas presenta un archivo fotográfico curado por Manu Mojito, fotógrafx y artista visual que coordina la Historia Transcuir de Colombia. En esta galería de fotos de los años 70 se conjugan festivamente moda, memoria y travestismo.
La Historia Transcuir de Colombia es un proyecto de investigación y preservación de la memoria trans, cuir, no binaria colombiana. El archivo de la memoria trans de Colombia1 nace de la necesidad de mostrar a las diversidades más allá de lo que se mostraba en la prensa amarilla.
Las fotos evocan a referentes de la vida colombiana trans en espacios de resistencia, como los reinados, los certámenes de belleza y los festivales de folklore colombiano que se hacían en las quintas de la clase alta para escapar de la represión y persecución policial, y para celebrar las vidas trans.
Las imágenes presentadas en esta galería de fotos pertenecen a los años 70 y exhiben a tres exponentes del transformismo colombiano, cuyas historias de lucha y orgullo forman parte de la memoria trans nacional. Se trata de Georgette, Kaperuzza e Itala María, a quienes veremos maquilladas, adornadas y luciendo trajes brillantes que reflejan la importancia de la moda y de la construcción de la apariencia.
Georgette, famosa transformista de los años 70, en la portada de la revista Vea a finales de esa década. Devota de la moda, cosía su ropa, confeccionaba los disfraces y experimentaba hábilmente con el maquillaje. En efecto, Georgette era maquilladora de profesión y transformista por vocación. En entrevista con revista Vea afirmaba:
«Afortunadamente, el mundo da muchas vueltas. Lo que yo hago es un arte como cualquier otro. Mi trabajo es sano, artístico y está bien hecho. Quiero que sepan que existen seres como yo. No creo que ser así sea tan terrible como dicen que es. No me siento ni mejor ni peor que nadie, soy solamente un testimonio; diferente, sí, pero no antinatural. Al contrario, creo que la naturaleza se ha mostrado complaciente conmigo y me ha dado la belleza para realizarme con maestría y talento. Se nace travesti como se nace poeta. Después de todo, el espejo me dice que soy una criatura encantadora, hasta rara, sí, pero encantadora».
Frente a las persecuciones sufridas por la policía, las palabras de Georgette revelan la lucha por la visibilización y la reinvidicación de sus derechos:
«Es necesario que se reconozca nuestra minoría. Insistir sobre los derechos de reunión, de publicidad, de discusión como parte de la lucha por los derechos civiles y, en fin, por la igualdad social. No somos ciudadanos de segunda clase, somos iguales a todo el mundo (…) Ha llegado la hora de salir de las tinieblas en las que la sociedad nos ha puesto. Recuerdo que no hace mucho, cada vez que venía la policía nos teníamos que encaramar al tejado del establecimiento. No se imagina lo incómodo de la encaramada en tacones puntilla, muertas de frío con la peluca en la mano, teníamos que esperar horas hasta que las autoridades se marchaban. No más presentarnos en lugares sórdidos con miedo a la policía y al escándalo. Es época ya de dejar de vivir pensando en el qué dirán, ¡los tiempos cambian!»
Aquí encontramos a figuras famosas de la Historia Trans. De derecha a izquierda, en esta fotografía perteneciente al archivo de Kaperuzza, vemos a Lupe de la Vega, Kaperuzza, Karlota Samper, Regina y Ricardo Lino en una de las competencias de belleza de 1974. Por supuesto, estos concursos no eran los reinados oficiales de Miss Mundo, sino espacios de sociabilidad y celebración informales y clandestinos, ocultos de las fuerzas policiales. Las competencias y fiestas fueron espacios intervenidos por personas con experiencias de vida trans que se convirtieron, sin dudas, en lugares de subversión del orden.
Kaperuzza es una de las figuras que ha aportado en el terreno del maquillaje, el estilo y la vida nocturna, y abierto lugares desde la moda, el espectáculo y la televisión, impulsando a otras identidades a construirse libremente. Protagonista indiscutida del mundo del transformismo y la cultura de la interpretación y la fonomímica, las imágenes y memorias denotan el saber y el placer de la experimentación con los colores, brillos y maquillajes para sobresalir y conseguir la corona celebrada. La fiesta se configura como lugar de resistencia y un espacio seguro para las vidas trans.
«Para ser travesti, para la época tenías que tener dos cosas: primero, tener talento, tener el por qué serás travesti, y tener dinero, porque no había acceso de nada hasta los 80, de conseguir una peluca buena, unas pestañas, unos zapatos. A mí me tocó todo importado, las pelucas de Revlon, las pelucas que estaban en París y en Nueva York. (…) La moda la descubrí por mi mamá, con ella aprendí a conocer los materiales que estaban en esta época, y la textura y la alta moda, y la belleza de las mujeres».
Foto del archivo de Itala María, de quien se decía que era la más bella en los años 70. Experta peluquera, trabajó en los carnavales y fiestas colombianas, y llamaba la atención por su belleza y habilidad para trajearse y peinarse a la moda.
«Estuve en varios reinados y en todos los que participé gané. Se alquilaban lugares para los eventos donde todas nos congregábamos; teníamos la juventud y la belleza. Pero los primeros reinados fueron terribles, llegaba la policía y dañaba el reinado. Han apresado a varias, yo me libré porque pasé por mujer».
«Vestida con elegantísimo traje rosado intenso, peinado alto y maquillaje discreto, complementado además con verdadero porte de reina de belleza, zapatos plateados y grandes aretes ídem, se da cuenta del furor que causa entre sus ‘fans’ y empieza a desplegar estrategia de besos, guiñadas de ojo y corto saludo de mano a quienes luchan por alcanzarla desde el borde del escenario» («En barranquilla la noche estuvo LOCA, LOCA, LOCA» Revista Vea, 1977).
Bailarinxs en noche de shows a inicios de los años 80, en nota de la revista Vea. El extracto afirma «Dentro de los aberrados sexuales existen tipos intermedios que se pueden considerar en una «tierra de nadie», no se definen ni como mujeres ni como hombres. Son los transvestistas».
Ubicados en una «tierra de nadie», las protagonistas de estas fotografías reivindican y celebran ese territorio lateral y seguro que supieron construirse. Una vez avanzada la década de los 80s, las imágenes del archivo trans permiten ver una mayor apertura y visibilización para los reinados y fiestas que estaban en la clandestinidad.
Para recorrer los archivos y escuchar más historias en boca de sus protagonistas, lxs invitamos a escuchar el podcast de la Historia Transcuir de Colombia y las redes del archivo (@colombiatranscuir).
- El archivo ha formado de la exposición «Las metamorfosis» de Madalena Schwartz en el Museo Malba, curada por Gonzalo Aguilar y Samuel Titan Jr. (2021). ↩︎